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¿Acabarán los médicos con las enfermedades y las dolencias?

La atención médica está creciendo a un ritmo acelerado en todo el mundo. Esta industria está floreciendo debido al crecimiento exponencial de la población y porque cada país tiene una población predominantemente envejecida. Más personas necesitan atención médica.

En el pasado, un médico le hacía a cada paciente un examen físico y ordenaba análisis de laboratorio. Con base en los resultados, un médico llegaría a un diagnóstico, basándose en la intuición, el conocimiento médico y la experiencia clínica. Sin embargo, dado que la ciencia médica está cambiando tan rápidamente, esta escena familiar de la práctica médica puede volverse obsoleta.

Hoy en día, la tecnología sanitaria y la ciencia médica están experimentando un cambio de paradigma. El nuevo modelo médico se basará en la medicina de precisión. Este nuevo tipo de medicamento proporciona tratamientos médicos basados ​​en el ADN de una persona. En el futuro, en lugar de leer un cuadro de síntomas para diagnosticar a los pacientes, los médicos revisarán los cuadros de ADN para llegar a un diagnóstico.

Este cambio de paradigma en el cuidado de la salud hará que sea cada vez más fácil atender a más personas, así como atenderlas mejor y a un ritmo más rápido.

El ADN cambia las reglas del juego

El ADN ayuda a los médicos a comprender su estructura genética única. El conocimiento de su genoma personal hará que sea mucho más fácil para su médico comprender su enfermedad y decidir el mejor curso de tratamiento.

Llegará el día en que la idea de revisar una lista de síntomas y relacionarla con una enfermedad parecerá anticuada.

Los profundos conocimientos que los informes de ADN pueden revelar sobre sus características biológicas han hecho que las pruebas de ADN en el hogar sean muy populares. Después de hacer un hisopado en la mejilla con un trozo de algodón y enviar una muestra de ADN a un laboratorio de pruebas genéticas, recibirá un informe detallado de ADN en dos semanas.

Un informe de ADN puede transformar la vida y ofrecer pistas vitales sobre cómo tomar decisiones de estilo de vida más inteligentes para una salud óptima.

Una hoja de ruta para la atención médica preventiva

Actualmente, cuando realiza un chequeo anual, su médico verificará sus estadísticas vitales. Él o ella medirá su presión arterial, frecuencia respiratoria, temperatura y frecuencia cardíaca.

Si bien esta es una buena forma de controlar su salud, todo este proceso cambiará en el futuro. En lugar de hacerle un examen físico, su médico revisará su genoma personal para comprender mejor la historia de su salud.

El ADN es como una hoja de ruta que le muestra a su médico sus fortalezas y debilidades genéticas.

Al revisar su genoma, su médico podrá determinar si usted es un futuro candidato para una enfermedad grave, como diabetes o un ataque cardíaco. Con base en esta información, su médico podrá sugerir cambios en el estilo de vida para evitar que se actualicen enfermedades potenciales.

La inmunoterapia ya está aquí

Comprender su ADN ayuda a los profesionales de la salud a diseñar planes de inmunoterapia para los pacientes.

Los profesionales médicos crean sus planes en función de la predisposición de una persona a ciertos tipos de enfermedades graves. Estos planes tienen como objetivo fortalecer el sistema inmunológico, preparándolo para combatir posibles enfermedades.

La idea de desarrollar un plan de inmunoterapia no es una posibilidad futurista. Ya existe y la planificación de tratamientos de inmunoterapia es ahora casi un proceso de rutina.

Una visión futurista de la atención médica

Aunque puede parecer bastante descabellado hablar de una era en la que los seres humanos ya no se enferman, nuestro conocimiento avanzado del genoma humano sugiere esa posibilidad.

Más adelante en este siglo, es posible que las personas no se enfermen en absoluto.

Al notar los marcadores de ADN de un bebé, el médico del niño tendrá información más que suficiente para elaborar un plan de salud integral para toda la vida.

La atención médica ya no intentará curar enfermedades, sino que se centrará en prevenir las amenazas a la salud de una persona. Comprender a los pacientes a nivel genético hará que la medicina preventiva sea la norma y no la excepción.