En 2019, los científicos notaron un oscurecimiento en la estrella masiva Betelgeuse en la constelación de Orión. Los científicos que observaron esto más de cerca notaron que la estrella continúa desvaneciéndose en 2020. Esta situación fue interpretada por algunos científicos como señal de una gran explosión. Los astrónomos analizaron datos del Telescopio Espacial Hubble y otros observatorios. Encontraron que una porción significativa de la superficie de la estrella se había perdido. “Algo está pasando que no entendemos completamente”, dijo Andrea Dupree, astrofísica del Centro de Astrofísica Harvard & Smithsonian en Massachusetts. Estamos tratando de resolverlo. Con el Hubble intentaremos descifrar los detalles de la superficie que podemos observar directamente. “Estamos monitoreando la evolución de las estrellas en tiempo real”, dijo.
LA EXPLOSIÓN SE VERÁ EN EL DÍA
Las explosiones ocurren con frecuencia en el sol. Sin embargo, si el campo magnético creado por estas explosiones golpea la Tierra, puede tener un impacto en las redes eléctricas y de comunicaciones basadas en satélites. Sin embargo, las erupciones que ocurrieron en Betelgeuse son más de 400 mil millones de veces más grandes que el Sol. Según los científicos, Betelgeuse se hinchó hasta convertirse en una supergigante roja mientras quemaba el combustible de su núcleo. Así, la estrella alcanzó un diámetro de 1.600 millones de kilómetros. Eventualmente, la estrella experimentará una explosión de supernova, un evento que se puede ver brevemente durante el día en la Tierra.
Betelgeuse es conocida como una de las estrellas más brillantes de la Tierra durante la noche.
