Un hombre llamado Alexander Chechik, que pretendía presumir con la granada que sostenía en lugar de sostener el teléfono del lado opuesto y posar, murió cuando la bomba explotó.
Para las personas que disfrutan tomando y compartiendo fotos, tomar el mismo tipo de fotos puede ser aburrido, lo admitimos. Por eso conocemos a personas que toman fotografías haciendo cosas que nadie más hace para ser diferentes y crear conciencia, y lo que les sucede como resultado. Por ejemplo, los estudiantes de secundaria que perdieron la vida por electrocución mientras intentaban tomarse una selfie en un vagón abandonado en la estación de tren todavía están en nuestra memoria. Aparte de eso, recordamos a las personas que provocaron la muerte del pobre animal mientras se tomaban fotos con la cría del delfín, que recogían en la playa o en los balnearios. Pero una persona llamada Alexander Chechik, creo, intentó un evento que nadie se atrevería a hacer fácilmente, y desafortunadamente pagó el precio con su vida.
Según los informes de los medios extranjeros, un joven de 26 años llamado Alexander Chechik murió después de la explosión de la bomba mientras intentaba tomarse una selfie con una granada de mano. En las declaraciones de la policía se afirma que Alexander Chechik tomó el pin de la bomba y tomó fotografías y se las envió a sus amigos. Las autoridades creen que Chechik no quería suicidarse, ya que pensó que no explotaría a menos que lanzara la bomba.
Las autoridades ahora están investigando dónde obtuvo esta bomba Chechik, quien supuestamente intentó tal trabajo, principalmente para presumir ante sus amigos.
