A la luz de la disputa en curso con Epic Games y las dificultades de COVID-19, Google ha anunciado varios cambios.
En primer lugar, decidieron facilitar a los desarrolladores la creación de sus propias tiendas de aplicaciones en dispositivos Android. Sin embargo, la nueva actualización aún está lejos y no se espera hasta el lanzamiento de Android 12 el próximo año.
Al mismo tiempo, mencionaron que ya permiten que algunos teléfonos inteligentes Android usen una tienda de aplicaciones además de la suya. Se referían a la tienda de aplicaciones Samsung Galaxy.
La segunda parte del reciente anuncio de Google fue sobre compras dentro de la aplicación. Google anunció su política de pago actualizada, que requiere que todos los desarrolladores que venden productos digitales procesen sus pagos a través del sistema de facturación de Play Store.
Teniendo en cuenta el escenario actual, Google decidió permitir a los desarrolladores hacer que sus aplicaciones cumplan con esta nueva política de pago antes del 30 de septiembre de 2021. Prácticamente, los desarrolladores tienen un año para realizar los ajustes necesarios. De lo contrario, también podrían sufrir el destino de la aplicación Fortnite, que fue quitada de Play Store.
Según Google, estos cambios afectarán a menos del 3% de los desarrolladores. Eso significa que el 97% de las aplicaciones ya cumplen con el sistema de facturación actualizado, incluidas las tarifas de las compras dentro de la aplicación.
Sin embargo, empresas como Spotify y Netflix forman parte de la masa más pequeña de desarrolladores. Sus aplicaciones no cumplen con los términos de la política actualizada. Actualmente, logran eludir la enorme tarifa del 30% de Google en las compras dentro de la aplicación al permitir que sus clientes se suscriban directamente.
Recientemente, Basecamp, Match Group, Spotify y Epic crearon la Coalition for App Fairness para oponerse a las masivas restricciones de compra dentro de la aplicación impuestas por Apple. La nueva postura de Google refleja su política de pago actualizada, que está en línea con lo que ha estado haciendo Apple. Como resultado, Google también podría obtener cierta resistencia de las empresas que forman parte de esta nueva coalición y otros desarrolladores de aplicaciones.
Google les dio a los desarrolladores un plazo de un año para cumplir con su nueva política de pago. Eso significa que no están preparados para abordar el problema de inmediato. En cambio, parece que quieren ver cómo funcionan las cosas entre Apple y las partes opuestas sobre su sistema de facturación.
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