iOS 13 fue la actualización con más errores en la historia del sistema operativo. Mucha gente sigue quejándose de errores en sus iPhones, así como de bloqueos del sistema y “fallas” de programas que no se pueden arreglar en la oficina de Apple.
Las complicaciones del sistema, que conllevan fallos del sistema, están asociadas, en primer lugar, a la amplia funcionalidad que ahora ha comenzado a presentar iOS. Nuevas funciones, nuevas aplicaciones, nuevos widgets, emoji para su teléfono inteligente sobrecargan el sistema y Apple no puede seguir el ritmo de todo.
Es por eso que la compañía lanzará un nuevo enfoque para probar las actualizaciones, que incluirá la capacidad de deshabilitar las actualizaciones del sistema “sin terminar” de forma predeterminada. Lo más probable es que a los usuarios se les permita habilitar y deshabilitar de forma selectiva las actualizaciones si aparece algún error en ellas a través de un menú especial.
Anteriormente, lanzar una actualización significaba corregir errores menores de los que se quejaban los usuarios para solucionar el problema lo antes posible. Por lo tanto, los dispositivos recibieron “píldoras” sistémicas que no tuvieron tiempo de probar en la oficina, casi todos los días, por lo que se volvieron muy voluminosos.
La nueva estrategia ya se está aplicando para el desarrollo de iOS 14, con nombre en código “Azul” y se dará a conocer el próximo año. Esta tecnología se aplicará a todos los sistemas operativos de Apple, incluidos iPadOS, watchOS, macOS y tvOS.
Fuente Bloomberg
